Clausura I Congreso Nacional de Sociedad Civil

España necesita una Sociedad Civil fuerte y capaz de anticipar de forma colaborativa las líneas fundamentales de la acción política

 

El Congreso “Repensar España” lanza un mensaje de optimismo para superar los problemas desde la constatación de la preocupación por la situación del país.

 

Madrid, 28 de febrero de 2020.- Madrid, 28 de febrero de 2020.- “España necesita una sociedad civil fuerte, capaz de reflexionar de forma serena, anticipar las líneas fundamentales por las que transitará la acción política, colaborar y estimular a sus representantes políticos para que alcancen los acuerdos que atiendan las necesidades de los ciudadanos”. Esta ha sido una de las principales conclusiones del I Congreso “Repensar España: una aportación desde la Sociedad Civil”, organizado por la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora (SOCIA).

“Para defender a España y a la libertad no bastan los partidos políticos, es necesaria la concurrencia de la sociedad civil. Hombres y mujeres de diferentes sectores dispuestos a arreglar los problemas del país. No me gusta una España inmóvil, sino una España dinámica, abierta al porvenir y que se apoye en su historia para lanzarse al futuro”, ha señalado la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante el acto de clausura.

El presidente de SOCIA, Aldo Olcese, destacó que “una sociedad civil sana, independiente y comprometida puede hacer que muchas cosas cambien sin que cambien las leyes. Desde la lealtad a las instituciones y con espíritu colaborativo”. Por su parte, el director del Congreso y secretario general de SOCIA, Alfredo Dagnino, insistió en la necesidad de “una Sociedad Civil adulta y vertebrada, formada por personas e instituciones concienciadas, comprometidas y generosas que anteponen el bien común al particular”.

 

“Es el momento de establecer un proyecto común, transversal, intergeneracional y que contribuya a mejorar la vida de todos los españoles”, apuntan sus conclusiones.

 

En el encuentro, que ha reunido durante dos días a más de 1.200 personas en el Casino de Madrid, se ha querido lanzar un mensaje de optimismo, desde la convicción de que España es una gran nación y que tiene la capacidad, las personas y los medios necesarios para superar sus problemas, aun habiendo constatado una amplia preocupación por la situación que atraviesa el país.

Las conclusiones del Congreso subrayan la importancia de buscar y generar soluciones para garantizar la continuidad y mejora de la democracia, desde la centralidad, la prudencia y el consenso, y apuntan a que ha llegado el momento de establecer un proyecto común, transversal, intergeneracional y que contribuya a mejorar la vida de todos los españoles.

Con sus luces y sus sombras, España se encuentra entre los países más avanzados del mundo y cuenta con un Estado Social y Democrático de Derecho plenamente consolidado,  que ha permitido a los españoles alcanzar unas cuotas de bienestar y de libertad antes desconocidos. También se ha constatado que hay elementos positivos para defender un proyecto de nación en torno a nuevos liderazgos relacionados con la transformación digital y la economía de la ecología.

Sin embargo, vive una crisis de la democracia representativa, amenazada por movimientos populistas y nacionalistas, y una crisis del Estado del Bienestar que provoca un aumento de las desigualdades y tensiones sociales. A ello se suman los problemas derivados de la organización territorial, del sistema electoral y de la debilidad de la conciencia nacional de los españoles, consecuencia de la instrumentación de la educación y la desafección y desconocimiento de la historia contemporánea entre los más jóvenes.

Además de estas conclusiones, estas son otras ideas para el debate y la reflexión expuestas en la clausura del I Congreso Nacional de  la Sociedad Civil:

• Desde 2008 se ha producido un aumento de las desigualdades sociales y una reducción de la clase media, que desemboca en una creciente inestabilidad y conflictividad social. Se ha extendido el descontento de la población y la desconfianza hacia los políticos y las instituciones, ante su incapacidad de revertir la situación y devolver a las clases medias el poder adquisitivo perdido y garantizar el futuro de los más débiles.
• Es esencial prestigiar la política y la Administración para conseguir que los mejores talentos del país se pongan al servicio del interés general. Se debe exigir una sólida formación, una mínima experiencia de gestión de personas y un cierto sentido de la ejemplaridad pública. La sociedad civil también ha de aprender a recuperar buena imagen de la función política.
• Se debe abordar de forma urgente el drama demográfico que sufre nuestro país por el envejecimiento progresivo de la población y el abandono irreversible del medio rural.
• La dignidad de la persona humana y los derechos fundamentales son uno de los pilares fundamentales de nuestro Estado y de la convivencia civil y, por ello, es necesario garantizar la protección de las personas y la familia.
• Es necesario adaptar la educación de las nuevas generaciones para dotarles de los conocimientos, habilidades y competencias necesarias para afrontar los retos que plantean la sociedad actual.
• Se debe conseguir una formación profesional atractiva e incentivar su colaboración con las empresas.
• Hay que repensar nuestro sistema de educación superior. La universidad debe ser un lugar en el que se promueva la formación integral de la persona y no limitarse a la formación profesional y técnica ni a estar al servicio de las empresas, sino en colaboración con ellas.
• Debe garantizarse tanto la existencia de la educación pública como del derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos.
• Los medios de comunicación son esenciales para la formación de la opinión pública y para funcionamiento de la democracia representativa y, por ello, urge encontrar una solución a los problemas que atraviesan.
• España debe adoptar, de forma urgente, un plan estratégico en materia de nuevas tecnologías y digitalización que establezca cuáles son las prioridades en este campo y cuál es el lugar que quiere ocupar.
• España necesita  una regulación jurídica sólida en materia de emprendimiento que favorezca las inversiones tanto públicas como privadas en start-ups, especialmente en aquellas que tengan un alto componente de I+D+i y que tengan un especial valor añadido.
• España no debe quedarse atrás en el proceso de globalización y debe poner todas sus energías en incentivar tanto al sector público como al sector privado a beneficiarse de sus efectos, desde una perspectiva ética relacionada con el ejercicio de un nuevo capitalismo inclusivo.
• El proyecto europeo también está atravesando una crisis profunda. Tras la salida del Reino Unido, España se convierte en la cuarta economía europea y, por tanto, y debe aprovechar esta oportunidad

Sobre SOCIA

La Asociación Sociedad Civil Ahora es una entidad constituida en 2018, que integra a un amplio conjunto de organizaciones e instituciones de reflexión, pensamiento y acción de la sociedad civil en torno a un proyecto común de mejora y renovación de España. Su misión es la de colaborar de manera leal, comprometida y responsable con los poderes públicos, las principales fuerzas políticas y el conjunto de la ciudadanía en el análisis, valoración y propuesta sobre cuestiones que afectan al bien común y al interés general de España.