Clausura y Conclusiones del III Congreso Nacional de la Sociedad Civil «Regenerar España»

Clausura y Conclusiones del III Congreso Nacional de la Sociedad Civil «Regenerar España»

 

Aldo Olcese Santonja. Presidente de la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora. Presidente del Comité Organizador del III Congreso Nacional de la Sociedad Civil

Queridos amigos, hemos llegado al epílogo, hemos llegado al final, y la verdad es que yo soy un hombre feliz, muy feliz, estoy muy contento porque este congreso creo que ha aportado mucho, hemos pasado un buen rato, se ha participado, se ha debatido, se han aportado ideas, la gente se ha comprometido y creo que no se puede pedir más.

Hemos tenido un nivel de ponentes de primerísima categoría, hemos aperturado el congreso con el presidente de los empresarios, lo vamos a clausurar con el primer ciudadano de Madrid. Y la verdad es que ha sido muy aleccionador, ha sido verdaderamente una gozada escuchar a tanta gente relevante sobre cómo ven España, sobre cómo ven Europa y con un sentido de ir hacia adelante. Hoy hemos tenido aquí a los mejores y más importantes referentes de la sociedad civil española.

Hay una sociedad civil potente. Lo más importante de estos congresos es lo que después se produce, esos documentos, esos libros, esos medios audiovisuales, de ponerlos al alcance de todos los grandes decisores de nuestro país, de los creadores de opinión y que les llegue. Yo tengo la satisfacción íntima y personal de que S.M. el Rey cuando vamos a hablarle de este congreso… Primero quiero agradecerle porque en tiempo récord nos dio la presidencia de honor. El Rey siempre vio enseguida que esto era un movimiento que había que había que apoyar.

La sociedad civil pide a nuestra clase política que hagan pactos de estado. También hemos hecho un esfuerzo, lo habréis visto, de tener gente de toda naturaleza y condición y hay que ser tolerantes y hay que ser moderados, hay que ser conciliadores. Aquí una de las grandes conclusiones que se ha repetido hasta la saciedad y en los tres congresos de la Sociedad Civil que yo he tenido el honor de presidir se ha repetido constantemente: la sociedad civil pide a gritos a nuestra clase política que hagan pactos, que hagan pactos de estado, que se pongan de acuerdo, que los denominadores comunes son muchos más de los que nos desunen.

Este congreso no es algo de la política, algo de la parapolítica, un camuflaje político. Nosotros estamos aquí para ayudar a los políticos, no para suplantarlos, nosotros creemos en el ejercicio de una política sana y leal. Nos parece que no hay nada más importante para un ciudadano que participar en un gobierno, ser diputado, representar a sus semejantes, representarlos con dignidad, con lealtad.

Hay que dignificar la política, hay que intentar también ayudarles a hacer las cosas mejor. Hay que perseverar cuando lo que se dice es bueno, es profundo, tiene buen criterio, tiene sentido común, se defiende bien, lo presentan personas que son cabales, que somos buenos padres y madres de familia, que creemos en la cultura del ejemplo y del sacrificio y que estamos aquí también para reconocer a la gente que lo hace bien. Es verdad que a veces no nos parece que sean los mejores. Es verdad que ha habido una degradación de la política y la mediocridad se ha impuesto en los que nos dirigen. Pero también es verdad que hay buenos referentes. Eso también es algo que nos ayuda a acertar, no intentar darle a la gente recetas desde una posición de supremacía intelectual, académica, doctrinal, sino con humildad diciéndole, intentando ver de qué manera quiere ser ayudado para ser efectivos.

El año que viene el congreso se va a hacer en Sevilla que ya sabéis que era el compromiso que teníamos: un año en Madrid y otro año fuera de Madrid. El año pasado fue en Valencia, que fue difícil. Era también un año de pandemia y ahí estuvimos. El año que viene estaremos en Sevilla.

 

CONCLUSIONES

Respecto de las conclusiones del Congreso ese es el verdadero valor que tiene lo que hacemos aquí, no tanto que hemos pasado un buen rato que hemos estado reunidos que está muy bien y las salas muy llenas y que eso es una satisfacción porque te sientes arropado. Aunque estuvieran vacías lo importante sería recoger todo ese acervo potente de personas de alto nivel, directivos, intelectuales, gente que está en la política.

  • Vivimos en un momento apasionante desde un país de privilegio que está gracias a Dios a pesar de todo lo que oímos y de todo lo que se dice, en una posición importante para jugar un papel en el contexto mundial y en un futuro que puede ser prometedor y de prosperidad a pesar de todos los pesares.
  • En España y en Europa hay muchas más cosas que nos unen de las que nos separan, es una primera conclusión clarísima. A gritos se ha pedido de muchas maneras que haya pactos de estado, que haya pactos de gobierno entre los grandes partidos, que es mucho más el acervo que tienen en común que lo que les aleja. Es verdad que hay cosas que le separan, pero es que solo hablan de lo que les aleja y hay veces que hasta lo que no les separa se convierte en separación con tal de no darle la razón al contendiente. Y creo que eso es algo que desde la sociedad civil tenemos que seguir insistiendo y machacando.
  • Europa es cada vez más importante y hay que hacer mucha pedagogía. Le hemos dedicado mucho tiempo en este congreso a Europa porque nos acordamos de Europa cuando nos da dinero, luego, a veces no somos muy europeos cuando hay cosas que no nos gustan que vienen de Europa. Pero Europa es esencial para nosotros, lo ha sido lo va a seguir siendo y por lo tanto tenemos que ser muy europeístas y practicar de tales, y tenemos que esforzarnos todos los ciudadanos en entender cómo funciona este nuevo país en el que para que funcione todo mejor decimos y recordamos cada día que debería estar más unido, y que debería haber unión presupuestaria, Unión fiscal, tener una defensa común, y debería ser todo común. Yo me alegro de que hayamos dedicado mucho tiempo a hablar de los temas internacionales en este congreso.
  • Hablar de los verdaderos problemas, de los desafíos, de las oportunidades. En fin, trabajar en ese espíritu de suma positiva, que es el que me mueve a mí y el que nos mueve en la Asociación Nacional de la Sociedad Civil Ahora y en estos congresos. Los desafíos son mayúsculos porque nuestra Europa, que es nuestra madre, tampoco está en el mejor de los mundos porque tiene unos hermanos mayores como los Estados Unidos, China, que están broncos, que lo estamos viendo cada día más, que son muy poderosos, que son más poderosos que nosotros, y nosotros tenemos que estar unidos. Y es verdad que la unión hace la fuerza. Europa es mucha Europa, pero Europa es menos Europa cuando está muy disgregada, y la verdad es que la guerra nos ha unido bastante, la pandemia también. Pero es una lástima que nos unan las desgracias. Tenemos que estar unidos más bien en lo positivo. Por eso ese trabajo del European Cultural Heritage, esa inclusión de la que hablamos constantemente, que hablamos del capitalismo inclusivo, pero es que la inclusión empieza por nosotros mismos a nivel europeo, pero nos cuesta mucho incluirnos.
  • La posición de España en Latinoamérica. También se ha concluido que hay que reedificar la posición de España en Latinoamérica. Ya no podemos seguir viviendo de los réditos del pasado y podremos estar más de acuerdo o no con esos regímenes populistas que hay por allí, pero es que son los que han elegido democráticamente en esos países o menos democráticamente, pero son los que hay y tú no los vas a cambiar, tienes la obligación de relacionarte con ellos. Es un esquema poliédrico y cada vez más complejo. Nuestros diplomáticos saben muy bien la dificultad que tiene el buscar esos equilibrios y que es nuestra obligación buscar esos equilibrios no vaya a ser que pidamos pactos de estado en nuestro país, pero luego no queramos hacer ningún pacto fuera de nuestro país, sino que lo que queramos es o dominar esto o aquello o tener aquel subordinado o lo que sea.
  • El posicionamiento energético de España. Yo creo que en torno al posicionamiento energético de España puede haber un new deal aquí, puede haber un nuevo milagro español también ligado a una nueva industrialización. Confío mucho en ello y tenemos una posición competitiva muy fuerte que no tiene ningún país europeo. España tiene una posición competitiva inesperada en uno de los ámbitos que se ha convertido en estratégicos y esenciales, que es la energía. Vamos hacia una economía de la ecología más que hacia una economía financiera como la que hemos estado viviendo las últimas décadas y el gran driver de los grandes y de las grandes soluciones y desafíos económicos va a ser esa economía de la ecología y no la economía financiera como hasta ahora. Y eso también implica una gran transformación. Bien, no quiero cansaros más. Agradezco mucho el tiempo que habéis dedicado a compartir este III Congreso Nacional de la Sociedad Civil. El IV Congreso Nacional de la Sociedad Civil será en Sevilla, espero veros allí.

MI último mensaje es lo importante de vertebrar la sociedad civil fuera de la capital de España, es muy relevante intentar hacer ese esfuerzo de compartir, de generar dinámicas positivas en nuestras grandes capitales.

Muchísimas gracias y hasta Sevilla.

 

José Luis Martínez-Almeida Navasqüés. Alcalde de Madrid

En primer lugar, este III Congreso Nacional de la Sociedad Civil es reflejo del esfuerzo continuado, persistente y tenaz durante muchos años, porque en España, de verdad, podamos contar con una auténtica sociedad civil y poder contar con un elemento que es básico para alcanzar la plenitud de una democracia.

Quiero agradecer a Montserrat Hernández el trabajo, a la que he tenido el gusto de entregar el premio al Líder Joven de la Sociedad Civil, el esfuerzo y el ejemplo con el que inspira, sus palabras, de las que tomo nota en relación con la división y la crispación que hay en general y en particular en la política.

Montserrat, persiguió sus sueños y los está logrando resultando un valioso ejemplo para el conjunto de la sociedad, especialmente para los más jóvenes, para los que habitualmente sólo hay discursos de desesperanza y casi de resignación.

El III Congreso habla de Regenerar España y de la presencia de la sociedad civil de manera urgente e inaplazable. Recuerdo el momento en que la política en España sirvió para unir, con la expresión de Adolfo Suárez de que la concordia fue posible. Hubo un momento en que desde las instituciones y desde la representatividad del conjunto de los ciudadanos, la política consiguió grandes logros para España. Reconozco que actualmente la política no está en estos momentos en la misma situación y que lo que se está generando son unos bloqueos, trincheras, enfrentamientos, crispaciones, confrontaciones que se han trasladado al conjunto de los ciudadanos.

Cuando se habla en España de los contrapesos del ejercicio del poder, es clásico hablar de Montesquieu y de la división de poderes. Pero considero que el verdadero contrapeso, el que fortalece nuestra democracia y vivifica nuestro modelo de convivencia, el que hace posible, de verdad, que podamos tener un estado de derecho con todas sus consecuencias, el verdadero contrapeso de estos esos poderes es la existencia de una sociedad civil fuerte.

No ha sido precisamente uno de los puntos fuertes de España y hay que hacer autocrítica, y entender que el progreso de España y los españoles sólo se podrá hacer desde la existencia de una sociedad civil que de verdad se articule, que de verdad sea un contrapeso al ejercicio de poder desde las instituciones. La articulación de un movimiento social de una sociedad civil que haga de España un país, desde el punto de vista democrático, más sano, más robusto y más fuerte, hará que sea un país en el que de verdad exista un auténtico contrapeso. Sin sociedad civil fuerte, el ejercicio del poder se torna abusivo, sin sociedad civil fuerte, el ejercicio del poder tiende a extralimitarse y sin sociedad civil fuerte, la existencia de los tres poderes es una quimera.

Hay que reclamar un futuro para los jóvenes, ser capaces de articular nuevamente la política como solución y no como un problema y ser capaces de que los ciudadanos se reconozcan en las instituciones y no de que las instituciones actúen al margen de los ciudadanos, ser capaces de armar un contrapeso desde la sociedad civil. Porque lo que en Europa nos une, lo que en España nos une será, sin lugar a dudas, una sociedad civil fuerte.

 

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Sociedad Civil Ahora

La Asociación Sociedad Civil Ahora es una entidad constituida en 2018, que integra a un amplio conjunto de organizaciones e instituciones de reflexión, pensamiento y acción de la sociedad civil en torno a un proyecto común de mejora y renovación de España. Su misión es la de colaborar de manera leal, comprometida y responsable con los poderes públicos, las principales fuerzas políticas y el conjunto de la ciudadanía en el análisis, valoración y propuesta sobre cuestiones que afectan al bien común y al interés general de España.